Lo primero que hay que explicar es que en el hemisferio norte se concentra la mayor parte de la población del mundo y no solamente eso, sino que además en el hemisferio norte se concentra también la mayor proporción de actividades económicas de la humanidad, por ejemplo, hay muchísimos más vehículos e industrias en el hemisferio norte que en el hemisferio sur.
Diferencia entre el hemisferio norte y el hemisferio sur en el mercado de combustibles.
El segundo punto importante que debemos mencionar es que cuando en el hemisferio norte están en verano, en el hemisferio sur estamos en invierno y viceversa.
Los dos temas que hemos explicado generan importantes cambios en la demanda de combustibles a lo largo del año. POR EJEMPLO: cuando nosotros en el hemisferio sur estamos en verano, en el hemisferio norte están en invierno y en muchos países de ese hemisferio norte la luz solar se reduce a pocas horas de tal manera que el trabajador que tiene una jornada típica entre las 8 de la mañana y las 5 de la tarde sale de su casa a oscuras y regresa también a oscuras y además con una temperatura muy baja y lo más probable es que su camino a casa esté nevado, por ello cuando llega a su hogar buscará tomar una bebida caliente, y si desea tomar una ducha lo hará con agua caliente y con seguridad utilizará calefacción para tener una temperatura confortable en casa.
Por las razones explicadas, aumenta fuertemente la demanda de combustibles usados para generar calor en el invierno del hemisferio norte como es el caso del gas natural, el GLP (que nosotros conocemos como gas propano o gas de balón), el Diesel y el Petróleo Industrial o Fuel Oil para generación eléctrica. Al subir la demanda mundial de estos combustibles sube su precio.
En contraste, cuando en el hemisferio norte están en verano, la luz solar se extiende por muchas horas y el trabajador sale de su centro laboral con muchas horas de brillo solar por delante y además las condiciones favorables del clima lo animarán a salir a diversas actividades fuera de casa, inclusive se acostumbra en muchos países de Europa a tomar vacaciones generalizadas en el mes de Agosto (pleno verano) y por ello muchas personas salen de viaje. Ésto aumenta mucho la demanda de combustible utilizado en el transporte. Para atender esta demanda los distribuidores de combustible habrán aumentado sus inventarios de esos combustibles con anticipación.
En el mercado de combustibles a este fenómeno se le llama el “driven season” es decir la estación o la época de manejar un vehículo. Como es previsible, si la demanda mundial de gasolina aumenta (hemos dicho que la mayor cantidad de vehículos está en el hemisferio norte), entonces el precio internacional de la gasolina sube también mucho en las semanas previas al “driven season” (justo en las semanas en que se forman los mayores inventarios para atender la inminente gran demanda).
Lo que hemos explicado se produce independientemente de lo que suceda con el precio del petróleo crudo y por lo tanto si el precio del petróleo crudo se mantiene estable en el año, el precio de algunos productos subirá en el verano y bajará en el invierno.
Si el precio del petróleo crudo baja puede darse el caso que aún en esa circunstancia algunos productos suban de precio por efecto estacional y el precio de otros productos podría bajar más que el precio del petróleo crudo.
Además de la situación explicada, los precios del petróleo crudo y sus derivados suelen ser muy volátiles y todos los días cambian en el mercado internacional. En teoría los precios tanto en las refinerías como en las estaciones de servicio o grifos deberían cambiar todos los días. En la práctica los precios se ajustan según la modalidad acostumbrada en cada país, en algunos en forma semanal, en otros mensual y en otros sin fecha fija.
Lo que si resulta frecuente es que en un escenario con mucha volatilidad y además teniendo en cuenta que cambiar precios siempre tiene un costo administrativo, los agentes económicos tienden a protegerse produciéndose lo que se llama “inflación por expectativas” y a veces se sube algo más o se reduce algo menos de lo que el mercado señala.
Una forma de lograr que el precio de los combustibles reduzca su volatilidad y se mantenga relativamente estable es el mecanismo de Estabilización que se explicará en la siguiente entrega.