Cuentan que, en Brasil en los años 50, el entonces presidente del Brasil, Eurico Gaspar Dutra, solía anunciar, en su discurso a la nación del primer día del año, el crecimiento del PBI del año recién finalizado. Al día siguiente el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) se ponía a elaborar las cuentas nacionales para convalidar el anuncio del mandatario.
Si bien este no es el caso del INEI, porque cuenta con una metodología transparente para estimar el PBI mensual, las cifras del crecimiento del PBI del mes de diciembre, anunciadas este último viernes, han sido tales que convalidan el crecimiento de 4% para todo el 2018, anunciado con pompa meses atrás por las autoridades de nuestro país.
El crecimiento del mes de diciembre divulgado por el INEI fue de 4.73% suficiente para que el crecimiento acumulado enero-diciembre de 2018 sea de 3.99%. El inesperado crecimiento del 4.73% para el mes de diciembre se ha basado en el estratosférico crecimiento de 1,258.42% del subsector “Elaboración y conservación de pescado, crustáceos y moluscos”.
¿Es posible que un sector crezca más de 10 veces en un mes? La respuesta es sí. Basta que la producción en el mismo mes del año anterior haya sido cercana a cero para que esto sea posible. En el caso extremo, si la producción en cualquier mes del año anterior fuera igual a cero, bastaría que el nivel de producción en el mismo mes del año siguiente, aun siendo pequeña, fuera mayor a cero, para generar un crecimiento infinito. La metodología del INEI contempla un ajuste a la base cuando se dan estos casos. Sin embargo, el INEI no tiene una regla precisa de cómo efectuar al ajuste cuando la producción del año anterior es muy baja pero no es estrictamente igual a cero y, por ello, se generan distorsiones como las señaladas.
En la Tabla 1 se muestran las cifras de crecimiento de las actividades del Subsector Fabril Primario para diciembre del 2018 divulgadas por el INEI. Las ponderaciones utilizadas para llegar al crecimiento del subsector corresponden al año base 2007. Se observa que la ponderación de la actividad “Elaboración y conservación de pescado, crustáceos y moluscos “es 5.30. Esta ponderación que corresponde al año 2007 y no al 2017 genera un crecimiento del subsector Fabril Primario de 46.77% a pesar de que la actividad más importante del subsector, “Fabricación de productos primarios de metales preciosos y otros metales no ferrosos” (ponderación 11.40) registró una caída de 3.92% y la fabricación de productos de refinación de petróleo una caída de 13.48%.
El inflado crecimiento del subsector Fabril Primario, cuando se pondera con el subsector Fabril No Primario (ver Tabla 2) genera un crecimiento sesgado del sector manufactura de 12.41% a pesar de que el subsector Fabril No Primario registró un crecimiento de apenas 1.66%.
Lo anecdótico del crecimiento de 12.4% del sector manufactura es que se da cuando las actividades que más empleo formal generan en el sector manufactura como Fabricación de Calzado y subsector textil están en franco deterioro. En el mes de diciembre, la actividad de fabricación de calzado registró una caída de 46.2% que se suma a las caídas de meses anteriores mientras que la actividad de fabricación de tejidos de punto y ganchillo cayó 35.42%.
Otro sector que en el mes de diciembre registró un crecimiento sesgado es el sector de construcción. El INEI estima que el sector creció 4.58% a pesar de que el componente de mayor ponderación (73.9%) que es el consumo interno de cemento cayó 1.23%. El crecimiento del sector se debió al crecimiento del componente avance físico de obras que creció 10.76%. Tradicionalmente los componentes de consumo de cemento y avance físico están correlacionados, lo cual no ocurrió en diciembre 2018.
Con los crecimientos sesgados de los sectores de manufactura y construcción se ha logrado que el PBI global crezca 4.73% a pesar de que el sector minería registra una retracción (-1.23%) y los sectores agricultura, servicios prestados a empresas y comercio se hayan desacelerado significativamente (ver Tabla 3).
Los estimados del INEI nos revelan la urgencia de actualizar el año base de la estructura de ponderación del PBI. La mayoría de los países la actualiza cada 5 años. La del INEI ya lleva más de 10 años sin actualizar. Otro mensaje es la necesidad de mejorar la metodología de estimación mensual del PBI para evitar casos como el del mes de diciembre o el caso de los arándanos en 2017.
Las metodologías de estimación del PBI trimestral y anual corrigen el defecto de la estimación mensual al utilizar el equilibrio de la oferta y demanda. Como consecuencia se deben esperar reajustes en el estimado del PBI mensual cuando la información trimestral y anual sea divulgada. Sin embargo, la importancia de la información mensual reside en su utilización por los agentes económicos para la toma de sus decisiones. Una estimación sesgada puede llevar a decisiones equivocadas, especialmente porque es la primera información en ser divulgada.