La ministra de Medio Ambiente, Fabiola Muñoz, informó que el Gobierno invertirá alrededor de US$ 60 millones en una zona clave de la Amazonía, cercana a Brasil y Bolivia, cuyos bosques tropicales fueron deforestados por la actividad ilegal de oro durante más de una década. La funcionaria precisó que estos recursos se invertirán en los próximos dos años en diversos sectores, donde dos tercios serán usados en actividades productivas y de formalización de aproximadamente 4.500 mineros que decidan trabajar en zonas permitidas por el Estado.
Cabe resaltar que, de acuerdo con los expertos, la minería ilegal es fuente de otros delitos, entre ellos la trata de personas, el sicariato, el narcotráfico y el lavado de activos. Además, se estima que hasta una cuarta parte de la producción anual de oro en el país proviene de la minería ilegal.