El ministro de Economía y Finanzas, Alonso Segura, informó que el Proyecto de Modernización de la Refinería de Talara (PMRT), a cargo de Petroperú, y la ampliación de la refinería La Pampilla, que realiza Repsol, no serán suficientes para cubrir toda la demanda de combustibles que tiene el Perú. Indicó que Talara y La Pampilla son las dos grandes refinerías que tiene el Perú y procesan el petróleo que se produce en el país, aunque dicha producción es menor con relación a países vecinos como Colombia.
Pese a los cuestionamientos al costo del PMRT (alrededor de US$ 3.000 millones), Segura indicó que el Gobierno decidió ejecutar la obra debido a que se tenía que contar con una planta nueva y por eso el 90% de la nueva refinería de Petroperú tendrá avanzada tecnología.
Otro motivo detrás del PMRT es el efecto ambiental, ya que la nueva planta permitirá elaborar combustibles con menos contenido de azufre, y permitirá dejar de lado la importación de combustibles con bajo contenido de este químico.
Segura subrayó que Petroperú es una empresa que es rentable pero no significa que no tenga que generarse eficiencias al interior de la empresa, lo cual es una exigencia establecida en la Ley de Modernización de la Refinería de Talara.
Por su parte, Petroperú precisó que al cierre de marzo del 2016, las obras del PMRT tienen un avance de 35, 9%, cifra que está por encima del 35, 6% programado.
Indicó que la empresa Técnicas Reunidas de España, que ejecuta el proyecto, continúa desarrollando las actividades de Ingeniería de Detalle, Planeamiento, Procura y Construcción, de acuerdo al nivel III del cronograma del proyecto.
Entre las principales actividades incluidas en este nivel figuran la culminación del desmantelamiento de tanques, demolición de edificios, (80 de 82) e instalación de oficinas temporales, entre otros.
Durante marzo del 2016, la mano de obra local no calificada contratada ascendió a 96%, cifra superior al porcentaje mínimo de 70%. Mientras que la mano de obra local calificada ascendió a 32%.