#ElDatoDelDía
La teoría indica que los países con mejores sistemas de salud cuentan con menores tasas de letalidad. La experiencia reciente con el Covid-19 nos lleva a discrepar de tal afirmación, puesto que aún con una superlativa infraestructura sanitaria si se incumplen las normas de distanciamiento social, el virus se convierte en una amenaza nacional.
Ese es el caso de Reino Unido, Francia y dentro de poco EE.UU., países que pese a liderar el Global Health Security Index, han sido desbordados ante la enfermedad por su resistencia a la rápida aplicación de medidas de supresión del virus. Lo mismo se puede afirmar de España, que confió en sus altos estándares de salud pública y no acató el oportuno distanciamiento social. Una línea aparte para Italia, que tomó a la ligera la propagación del virus teniendo un sistema de salud endeble.
En Perú, MAXIMIXE plantea dos temas para el análisis: (1) pese a tener un sistema de salud deficiente, la rápida adopción de una política de supresión ha propiciado una tasa de letalidad similar a las de Japón y Corea del Sur, de lo contrario sería igual a la de México; y (2) no obstante lo primero, es probable que la letalidad esté subestimada, y no por el menor número de pruebas pues Perú es líder regional en ese aspecto, sino por el hecho que la mayoría de ellas son pruebas rápidas, por lo que si sólo se consideraran las pruebas moleculares, la letalidad sería similar a las de Ecuador, Colombia y Argentina.
#LasCifrasHastaHoy
Al 21 de abril el número de pruebas realizadas se ubicó en 155.724. Preocupa que no crezca lo suficiente el número de recuperados, pues de ello depende el logro de la inmunización. Una consecuencia de lo anterior es el aumento del número de infectados activos, que incluso se anotó el aumento diario más grande desde que se inició la pandemia.
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