Boris Johnson, primer ministro británico, enfrentó una rebelión de sus propios legisladores por su estrategia de Brexit. Los legisladores del propio partido de Johnson se están preparando para unirse a la oposición para tratar de forzar un retraso en la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea (UE) porque no se ha podido asegurar un acuerdo con Bruselas en el que permita una salida sin grandes perturbaciones económicas.
A pesar de que Johnson asumió el cargo con la promesa de sacar a Gran Bretaña de la UE, los parlamentarios intentan retrasar su salida del Brexit hasta el 31 de enero del 2020, si no se llega a un acuerdo con Bruselas.