Ayer tuvo lugar el encuentro empresarial mensual del Club de Análisis Estratégico de Riesgos (CASER) organizado por la consultora MAXIMIXE, dedicado esta vez a analizar los “Ciclos Económicos y la Performance Sectorial del Perú”. El ex Presidente del Banco Central de Reserva, Jorge Chávez Alvarez, señaló que el crecimiento del PBI de 4,8% reportado para enero fue un hipo coyuntural y que en los siguientes meses será difícil repetir esos números, debido al efecto Lava Jato, sumado al de los huaycos, y la debilidad de la confianza empresarial y del consumidor. La debilidad del crecimiento se ha reflejado en la lentitud de la producción de energía eléctrica, que en febrero sólo pudo crecer 1,6%; la tasa más baja desde octubre de 2009.
Dijo que en febrero el consumo de cemento cayó por novena vez consecutiva, mientras el índice del nivel de ventas fue el más bajo visto desde agosto de 2016. Mostró preocupación porque el índice de confianza empresarial haya acumulado una caída de 9,1 puntos desde octubre, y porque el índice de confianza del Consumidor se haya ubicado en un tramo pesimista por segundo mes consecutivo. Señaló que revertir esta situación será difícil con una inversión pública en un retroceso de 21%; el cuarto bajón en el lapso de cinco meses. Aunque dijo que el buen manejo de la crisis climatológica que viene mostrando el gobierno, podría ayudar a que reboten ambos índices más adelante, mientras que los anuncios de mayor gasto público ayudarán a evitar un descalabro económico. Enfatizó que, a pesar de la dureza de los huaycos, su impacto aún está lejos de compararse con el de El Niño de 1997-1998, aunque ya lo superó largamente en cuanto a número de viviendas afectadas, debido a la mayor vulnerabilidad actual de los asentamientos humanos. Dijo que MAXIMIXE mantiene por ahora su proyección de crecimiento del PBI de 3,1% para 2017.
De otro lado, Erick Rey de Castro, Gerente General de Colliers Internacional expuso sobre el “Panorama y Perspectivas del Mercado Inmobiliario”, señalando que existe una sobreoferta en el mercado de oficinas prime del orden de un millón de metros cuadrados, que hacia el 2018 tenderá a generar una disminución de la producción de edificios y una mayor absorción con ventas con descuentos, en un mercado muy competitivo. Señaló que en el mercado de vivienda existe una demanda efectiva de 470 mil unidades, la cual irá creciendo en los próximos años impulsada por el ‘bono demográfico’. Dijo que lo que frena la oferta de viviendas son las restricciones crediticias aplicadas por los bancos.