En mayo del año 2013 se promulgó la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable, sin embargo a la fecha no ha sido reglamentada. Lo que busca el dispositivo legal es proteger el derecho a la salud pública para reducir enfermedades relacionadas al sobrepeso, obesidad y enfermedades crónicas no transmisibles.
Sin embargo, tanto la industria de bodegueros como la Asociación de la Industria de Bebidas y Refrescos sin Alcohol (Abresa) temen que los parámetros técnicos establecidos en la ley pueda afectar sus ventas ya que son exigencias mucho más estrictas de lo que se ve en otros países de la región.
César Luza, presidente de Abresa, indicó que de no hacerse algunas modificaciones a la Ley de Alimentación Saludable, el 95% de los productos que provee la industria estaría fuera de estándar. “Todo sobrepasa los límites establecidos por la ley”.
“Se ha establecido por cuenta del MINSA unos parámetros técnicos que si uno lo compara con otros países de la región es la tercera parte según se trate del ingrediente. Para las bebidas se ha puesto como alto 2, 5 gramos de azúcar por 100 mililitros, pero países como Ecuador tiene 7, 5 y recién desde ahí se considera alto. En Chile es 6 gramos”, precisó.
En su opinión, los parámetros técnicos establecidos en la ley aún sin reglamentar fueron diseñados con fines publicitarios. “Esto definitivamente puede impactar negativamente en la industria de bebidas y en la industria de alimentos en términos generales”, menciona Luza.
“La ley nos parece discriminatoria porque solo se preocupa por lo que produce la industria de manera formal. La Asociación comparte y hace suya la preocupación del Gobierno respecto a los problemas de obesidad que se presentan, pero el Perú también tiene un problema vinculado a la desnutrición y a la anemia, pero la ley no se ocupa de esos dos temas”, cuestionó.
Sin embargo, pese a que se pueda creer lo contrario, el presidente del gremio aseguró estar de acuerdo con que haya una obligación de etiquetar los productos a fin de colocar la información nutricional.
De otro lado, Luza manifestó que en la medida en que se registren altas temperaturas por efecto del fenómeno de El Niño, habrá un impacto positivo en la industria.
“En ese sentido las compañías realizan sus mejores esfuerzos, tanto a nivel de producción y distribución. Sin embargo, también hay zonas en las que El Niño puede significar más bien un retroceso por la accesibilidad de nuestra complicada geografía”, refirió.
No obstante, destacó que el consumo de este año está teniendo un desempeño adecuado con niveles de 3, 5% con relación al año anterior.