Según Goldman Sachs, se espera que los inventarios globales de crudo continúen bajando debido a los recortes en la producción y al fuerte crecimiento de la demanda.
“Dada nuestra proyección sin cambios de crecimiento de la demanda de 1,5 millones de barriles por día para el 2017, este nivel más alto debiera compensarse plenamente ante los niveles más alto de producción de Estados Unidos”, sostuvieron.
Esta coyuntura crea una incertidumbre en cuanto al futuro comportamiento de los precios del crudo. Se prevé que éstos suban en el segundo trimestre antes de caer para el resto del 2017.