El fenómeno de El Niño ha llevado a que el 2023 sea un año extremadamente desafiante para la agricultura en Perú, con proyecciones que sugieren que podría ser el peor año en las últimas dos décadas y media. El Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred) ha actualizado su informe de Escenario de Riesgo por Déficit Hídrico para el periodo lluvioso 2023-2024, destacando un nivel de riesgo muy alto de sequía asociada a El Niño, afectando aproximadamente 1,3 millones de hectáreas de superficie agrícola a nivel nacional.
La campaña agrícola 2023-2024, que comenzó en agosto, anticipa el cultivo de 2,2 millones de hectáreas, y el riesgo identificado por Cenepred implica que más de la mitad de esta superficie está en peligro. Además, 9,5 millones de hectáreas de pastos y millones de cabezas de ganado también enfrentan riesgos significativos. Varias regiones del país, incluyendo Áncash, Apurímac, Arequipa, y Cusco, están en situaciones de riesgo muy alto, afectando a cerca de 3,7 millones de personas. El Centro de Predicción del Clima de Estados Unidos ha incrementado la probabilidad de un evento El Niño fuerte en el verano al 71%, exacerbando las preocupaciones existentes.
Ante esta crisis inminente, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) ha implementado varias medidas y modificaciones a sus esquemas de aseguramiento a los productores agrarios. Iván Mena Alberca, director de Financiamiento y Seguro Agrícola del Midagri, mencionó que se han introducido 17 mejoras al sistema de Seguro Agrícola Catastrófico (SAC), incluyendo la reducción de plazos de atención y el incremento en el número de riesgos catastróficos cubiertos. Además, se ha lanzado el nuevo Seguro Agrario Cofinanciado (SAGRO) para la presente campaña agrícola, que es voluntario e individual, y está diseñado para agricultores cuya producción está orientada a abastecer a los mercados. Con estos instrumentos, se espera cubrir 1,6 millones de hectáreas con un presupuesto de S/ 80 millones.