Dichos terrenos presentan una oportunidad para generar oferta de vivienda social, regular costos de los suelos y establecer mecanismos que permitan vender a precios accesibles.
En caso de establecerse proyectos inmobiliarios con edificios de siete pisos sobre estos terrenos, se puede resolver el problema de la reconstrucción y cerrar considerablemente la brecha de acceso a la vivienda. Asimismo, una mayor oferta de suelo urbano, permitirá estabilizar los precios de los terrenos.